El 24 de
febrero de 1920, se celebró a petición de Hitler el primer
mítin multitudinario del Deutsche Arbeiter Partei (Partido Obrero Alemán) en Munich, donde Hitler leyó
el Programa de los 25 puntos del NSDAP, escritos por Hitler y Anton
Drexler, puntos que constituyeron el programa político del nacionalsocialismo.
En esta misma asamblea se decidió el cambio de nombre del
movimiento, pasando de Partido Obrero Alemán para el de Partido Nacionalsocialista
Obrero Alemán, cuyas siglas en alemán son NSDAP.
Los 25 Puntos
1. Exigimos la unión de todos los alemanes para constituir
una gran Alemania fundada
en el derecho de la independencia de que gozan las naciones.
2. Exigimos para el pueblo alemán la igualdad de derechos en
sus tratados con las demás naciones y la abolición de los Tratados de Paz de Versalles y Saint-Germain.
3. Exigimos espacio y territorio para la alimentación de
nuestro pueblo y para establecer a nuestro exceso de población.
4. Nadie, fuera de los miembros de la nación, podrá
ser ciudadano del Estado. Nadie, fuera de aquellos por cuyas venas circule
sangre alemana, sea cual fuere su credo religioso, podrá ser miembro de la Nación. Por
consiguiente, ningún judío será miembro de la Nación.
5. Quien no sea ciudadano del Estado, sólo residirá en Alemania como
huésped y será considerado como sujeto a las leyes extranjeras.
6. El derecho a sufragar para la formación del Gobierno del Estado y para
la sanción de las Leyes será ejercido únicamente por ciudadanos del Estado.
Exigimos, en consecuencia, que todas las funciones oficiales, sea cual sea su
naturaleza, tanto en la nación como en el campo y las localidades menores, sean
desempeñadas exclusivamente por ciudadanos del Estado.
Nos oponemos a la corruptora práctica parlamentaria de
llenar los puestos teniendo en cuenta solamente consideraciones de partido en
lugar de carácter o de idoneidad.
7. Exigimos que el Estado contemple como su primer y
principal deber el promover el progreso de la industria y el velar por la
subsistencia de los ciudadanos del Estado. Si no fuera posible alimentar a toda
la población del Estado, será indispensable que los residentes extranjeros sean
excluidos de la nación.
8. Hay que impedir toda inmigración no alemana. Exigimos que
se obligue a todo no ario llegado a Alemania, a
partir del 2 de agosto de 1.914, abandonar inmediatamente el territorio
nacional.
9. Todos los ciudadanos del Estado gozarán de iguales
derechos y tendrán idénticas obligaciones.
10. El primer deber de todo ciudadano del Estado consiste en
trabajar con la mente o con el cuerpo. Las actividades individuales no estarán
reñidas con los intereses generales, sino que se adaptarán al marco impuesto
por la comunidad y tendrán en cuenta las conveniencias de la misma.
11. Exigimos la abolición de todo ingreso no conseguido por
medio del trabajo.
12. En vista de los enormes sacrificios de vidas y
propiedades que exige toda guerra, el enriquecimiento personal logrado merced a
los conflictos armados internacionales se considerará como un crimen contra la Nación.
Exigimos, en consecuencia, la confiscación implacable de todas las ganancias
por medio de la guerra.
13. Exigimos la nacionalización de
todos los negocios que se han organizado hasta la fecha en forma de
agrupaciones de sociedades (trusts).
14. Exigimos que las utilidades del comercio al por mayor
sean compartidas por la Nación.
15. Exigimos que se ponga en práctica un plan gradual de
asistencia social a la vejez.
16. Exigimos la creación y mantenimiento de una sana clase
media, la nacionalización inmediata de las propiedades utilizadas en la especulación,
a fin de que se alquilen en favorables condiciones a pequeños comerciantes, y
que se tengan especiales consideraciones para con los pequeños proveedores del
Estado, de las autoridades de distrito y de las localidades menores.
17. Exigimos la reforma de la propiedad rural para que sirva
a nuestros intereses nacionales; la sanción de una ley ordenando la
confiscación sin compensación de la tierra con propósitos comunales; la
abolición del interés de los préstamos sobre tierras y la prohibición de
especular con las mismas.
18. Exigimos la persecución despiadada de aquellos cuyas
actividades sean perjudiciales al interés común. Los sórdidos criminales que
conspiran contra el bienestar de la Nación, los usureros,especuladores,
etc. Deben ser castigados con la muerte, sean cuales fueren su credo o su raza.
19. Exigimos que el Derecho Romano, que sirve al
régimen materialista del mundo, sea reemplazado con un sistema legal concebido
para toda Alemania.
20. Con el fin de proporcionar a todo alemán competente e
industrioso la posibilidad de una mejor educación y promover así el progreso,
el Estado abordará la reconstrucción total de nuestro sistema nacional de
educación. El plan de estudios de todo establecimiento educativo deberá
hallarse de acuerdo con las necesidades prácticas de la vida. El inculcar y
hacer comprensible la idea de Estado (Sociología del Estado) debe ser uno de
los propósitos fundamentales de la educación y comenzará con el primer destello
de inteligencia del alumno. Exigimos que el Estado eduque a sus expensas a los
niños dotados de superior talento e hijos de padres pobres, sean cuales sean la
respectiva clase u ocupación de estos últimos.
21. El Estado procurará elevar el nivel general de la salud
de la Nación amparando a las madres e infantes, prohibiendo el trabajo de los
niños, aumentando la eficiencia corporal mediante la gimnasia obligatoria y los
deportes y apoyando sin restricciones a los clubes fundados con el objeto de
promover el mejoramiento físico de la juventud.
22. Exigimos la abolición del ejército mercenario y la
formación de un ejército nacional.
23. Exigimos la adopción de medidas legales contra la
impostura política deliberada y su difusión por medio de la prensa. Para
facilitar la creación de una prensa nacional alemana:
a) Que todos los editores de periódicos y sus asistentes,
cuando empleen la lengua alemana, sean miembros de la nación.
b) Que la aparición de periódicos no alemanes no tenga lugar
sino en virtud de un permiso especial acordado por el Estado. No será
indispensable que tales órganos se impriman en alemán.
c) Que se prohiba por Ley la participación financiera o la
influencia de no alemanes en los periódicos germanos, estableciendo como
penalidad para los infractores la supresión del periódico y el inmediato
destierro de los no alemanes implicados en el asunto.
Debe prohibirse la publicación de órganos cuyos propósitos
no contemplen el bienestar nacional. Exigimos que se persiga legalmente a todas
las tendencias artísticas y literarias pertenecientes
a algún capaz de contribuir a la disgregación de nuestra vida como Nación, y la
supresión de cualquier institución cuyos fines estén reñidos con la citada
exigencia.
24. Exigimos la libertad para todas las denominaciones
religiosas dentro del Estado mientras no representen un peligro para éste y no
militen contra los sentimientos morales de la raza alemana.
El Partido defiende, en su carácter de tal, la idea del cristianismo positivo, más no se
compromete, en materia de credo, con ninguna confesión en particular. Combate
el materialismo judío filtrado entre nosotros y está convencido de que
nuestra nación no logrará la salud permanente sino dentro de sí misma y gracias
a la aplicación de este principio.
25. Para realizar todo lo que precede, exigimos la creación
de una poderosa autoridad central del Estado; incuestionables atribuciones del
parlamento políticamente centralizado sobre toda la Nación y sobre su
organización, y la formación de una Cámara representando a las clases y
profesiones, con el propósito de poner en práctica en los diversos estados de
la confederación las leyes generales promulgadas por la autoridad.
Los Jefes del Partido juran consagrarse sin desmayo y, si
fuera necesario, sacrificar su vida para lograr el cumplimiento de los puntos
precedentes.
Munich, 24 de febrero de 1920.
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